El control del dolor es un aspecto muy importante del tratamiento de cáncer. Para que los profesionales de la salud cuenten con la información necesaria para ayudarle, debe hablar con ellos sobre lo que le está pasando. Sólo usted puede describir el dolor que siente.
El médico le pedirá que describa y califique el dolor, así podrá conocer el dolor que tiene y conocer si su tratamiento está siendo efectivo.
Cómo hablar sobre el dolor
Informe a los profesionales de la salud sobre las características del dolor:
– Dónde tiene dolor
– Cómo es el dolor (por ejemplo: pulsátil, constante, ardiente, punzante)
– Cómo de fuerte es el dolor (por ejemplo: severo, no muy intenso, leve)
– Cuánto dura el dolor
– Qué alivia o empeora el dolor
– Cuándo aparece el dolor (qué momento del día, qué está haciendo en ese momento y qué ocurre)
– Cómo afecta el dolor sus actividades diarias (tales como dormir, caminar, bañarse y trabajar)
– Si el dolor afecta su estado de ánimo
Cómo medir el dolor
Para lograr conocer con exactitud cómo es su dolor se pueden utilizar unas escalas para calificar el dolor. Son escalas que por lo general va del 0 al 10, donde 0 significa que usted no siente ningún dolor y 10 significa que usted siente el peor dolor imaginable.
En algunas escalas de dolor no se usan números, sino palabras. En otras se usan caras para imitar las reacciones visibles de pacientes ante diferentes niveles de dolor. El paciente tiene que apuntar a la cara, las palabras o el puntaje de la escala que mejor refleja su nivel de dolor.
Aquí tiene algunos ejemplos de escalas del dolor:
Fuente: Control del dolor. Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos. Disponible en https://www.cancer.gov/espanol/cancer/control-dolor.pdf