El próximo 14 de noviembre se celebra el Día Mundial de la Diabetes. Debido a que millones de personas con diabetes no tienen, a día de hoy, acceso equitativo a la atención a su patología, la federación internacional de diabetes (IDF) ha lanzado este año su campaña con el lema “Acceso a la atención en diabetes: si no ahora ¿cuándo?”, pidiendo a los gobiernos y responsables políticos que:
- Garanticen un acceso a los cuidados fundamentales para pacientes diabéticos.
- Desarrollen políticas para mejorar la prevención de la diabetes tipo 2.
- Mejoren el cribado para conseguir un diagnóstico temprano y evitar complicaciones.
- Pongan en marcha mecanismo para que las personas con diabetes participen en el desarrollo de políticas para hacer frente a esta enfermedad.
Aprovechando esta campaña queremos dedicar la noticia a esta patología, que afecta a 1 de cada 10 personas en el mundo, según la IDF.
¿Qué es la diabetes?
La diabetes es un síndrome que provoca como resultado una elevación de los niveles de glucosa en sangre (hiperglucemia).
Los dos principales tipos de diabetes son la tipo 1 y la tipo 2. En la diabetes tipo 1, el cuerpo desarrolla una respuesta autoinmune contra las células del páncreas que secretan insulina. En la diabetes tipo 2, aparece resistencia a la insulina, por lo que a pesar de que el organismo libere mucha insulina, esta no puede actuar de forma correcta.
¿Cómo podemos prevenir el desarrollo de diabetes?
La diabetes tipo 1 no puede prevenirse, sin embargo la aparición de la diabetes tipo 2 sí que está influenciada por algunos factores de riesgo y hábitos de vida modificables como el exceso de peso, el sedentarismo o el consumo de tabaco. El desarrollo de una estrategia política enfocada en concienciar a la población para que siga unos hábitos de vida saludables y así reducir el riesgo de desarrollo de diabetes tipo 2, sería clave como estrategia de prevención.
El objetivo es conseguir unos hábitos de vida saludables, llevando una alimentación sana y equilibrada, realizar ejercicio físico de manera y habitual y mantener el peso en un nivel normal. Para alcanzar estos objetivos, sería recomendable seguir los siguientes consejos:
- Comer frutas y verduras en cada comida: aportan hidratos de carbono de absorción lenta y fibra.
- Equilibrar las fuentes de proteínas: reducir la ingesta de carnes rojas y favorecer las proteínas de origen vegetal presentes en las legumbres, frutos secos y cereales integrales. También es recomendable el pescado azul, aves y lácteos.
- Evitar el consumo de grasas saturadas: su ingesta eleva el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares. Este tipo de grasas están presentes sobre todo en productos de repostería industrial.
- Evitar el consumo de hidratos de carbono de absorción rápida y azúcares libres: presentes en zumos, harinas refinadas, refrescos azucarados o gominolas.
- No consumir tabaco ni alcohol.
- Realizar actividad física a diario: contribuye a mantener bajo control los niveles de glucosa en sangre. La OMS recomienda un mínimo de 30 minutos de ejercicio de intensidad moderada al día, como caminar o montar en bici.
- Controles periódicos del estado de salud: ayuda a controlar los niveles de glucosa en sangre y también la presión arterial y el colesterol.
Una vez diagnosticado: ¿cómo se pueden evitar las complicaciones de la diabetes?
Las principales complicaciones asociadas a la diabetes son: infarto de miocardio, accidentes cerebrovasculares, insuficiencia renal, pérdida de visión y amputación de miembros inferiores. Las principales medidas para evitar estas complicaciones se resumen a continuación.
- Control de la glucemia (glucómetro o sistema de monitorización continua), especialmente importante en los pacientes que requieren inyecciones de insulina, ya que permitirá ajustar mejor la dosis y detectar desviaciones.
- Control periódico de la hemoglobina glicosilada (HbA1c). Indicador del nivel promedio de glucosa en sangre en los últimos 2 meses.
- Revisar los pies a diario. Una de las consecuencias de la diabetes mal tratada es la pérdida de sensibilidad en las extremidades inferiores, que se conoce como pie diabético. Puede dificultar la detección de heridas en los pies, cuya mala curación puede generar úlceras con riesgo de necrosis y necesidad de amputación.
- Revisar periódicamente la vista, lo que permitirá un diagnóstico precoz de la retinopatía diabética.
- Controlar el consumo de grasas y evitar el alcohol. La ingesta de grasas y alcohol pueden ocasionar alteraciones hepáticas y cardiovasculares y facilitara que aparezcan complicaciones como daño renal.
- Hacerse controles de orina. Un análisis periódico de la función renal ayudará a detectar a tiempo complicaciones como la nefropatía diabética y la insuficiencia renal.
- Mantenerse activo para evitar la resistencia a la insulina y otros problemas como el pie diabético.
Fuentes: consultadas 04/11/2021
- https://fedesp.es/diabetes/prevencion/
- https://www.fundaciondiabetes.org/general/82/conozcamosla-mejor
- https://fedesp.es/campanas/dia-mundial-diabetes-2021/
Deja una respuesta