Durante el embarazo, pocos son los fármacos que se pueden utilizar libremente. Como todo el mundo sabe, siempre se deben tomar bajo supervisión y recomendación médica ya que hay que valorar siempre, el beneficio que aportan frente al posible riesgo que pudieran causar.
La información que se tiene acerca de cómo pueden afectar los medicamentos al bebé es muy limitada por lo que es siempre imprescindible que las mujeres embarazadas conozcan una serie de conceptos, recomendaciones o precauciones que puedan tener en cuenta, sobre todo si se encuentran en tratamiento para una patología crónica, para evitar posibles riesgos.
Los puntos clave que se tienen que tener en cuenta son:
- Evitar la automedicación. En caso de que se necesitase tomar algún medicamento siempre debe consultar a un profesional sanitario, médico o farmacéutico, antes de hacerlo. Lo mismo ocurre con los suplementos o las plantas medicinales
- Siempre se debe considerar la posibilidad de estar embarazada antes de tomar cualquier medicación ya que el primer trimestre de embarazo es cuando el festo presenta mayor riesgo de ser afectado por la toma de algunos fármacos
- Para las mujeres embarazadas con enfermedades crónicas, es muy importante que se asesore bien de las opciones y alternativas terapéuticas más adecuadas para su estado antes de quedarse embarazada. Esto permite seleccionar siempre el tratamiento más seguro y eficaz
Fuente:
http://www.perinatology.com/Reference/Prescription%20Drugs%20of%20Choice%20During%20Pregnancy.htm
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