Actualmente, en los casos de enfermedad por coronavirus se hace una vigilancia universal, siendo obligatoria la notificación de todos los casos de infección activa por COVID-19, según la Estrategia de Detección Precoz, Vigilancia y Control de COVID-19. Por lo tanto, a todas las personas con cuadro clínico de infección respiratoria (fiebre, tos, disnea u otros síntomas) se les debe realizar una prueba diagnóstica de COVID-19 (test de antígenos o PCR) de manera sistemática. Una vez confirmados los casos se deben declarar obligatoriamente y con urgencia a las unidades de Salud Pública de la comunidad autónoma correspondiente.
La relación de las personas con el coronavirus está en constante cambio y los protocolos y las restricciones son cada vez más laxos. De la mano de esta nueva relación con el SARS-CoV-2, la semana pasada el Ejecutivo anunció que está trabajando en un plan para abordar la COVID-19 como una enfermedad más y así pasar de la vigilancia universal a una vigilanciacentinela de infección respiratoria. Este cambio es lo que se ha denominado “gripalización”, ya que supone emplear para la COVID-19 un sistema de vigilancia similar al de la gripe común y otros virus respiratorios.
¿En qué consiste la vigilancia centinela de la gripe?
La mayoría de pacientes con gripe NO buscan atención en los centros de salud y medicina familiar. La monitorización rutinaria de cada uno de los casos sería muy complicada e inviable.
La Guía de Procedimientos para la Vigilancia de Gripe en España (publicada en 2019) explica el sistema de vigilancia de los virus de la gripe común en nuestro país, siendo el objetivo principal conocer la actividad de la gripe y saber cómo afecta a la salud pública y cómo es el virus. Uno de sus pilares es el sistema centinela (ScVHE), que se puso en marcha a finales de los años 90. Este sistema centinela ofrece información sobre los casos leves de gripe en la comunidad que acuden a las consultas externas de atención primaria.En el ScVHE participan 16 redes de vigilancia centinela, una por cada comunidad autónoma y ciudad autónoma, excepto Galicia, Aragón y Murcia. Están coordinadas por el Centro Nacional de Epidemiología junto con unos 20 laboratorios con capacidad de detección y asilamiento del virus, unidades administrativas e institutos de salud pública. En estas redes de vigilancia centinela participan médicos de atención primaria que recopilan datos sobre la gripe de los pacientes de sus centros de salud, obteniendo así datos epidemiológicos y clínicos para hacer una estimación del estado en que se encuentra la gripe común.
No hay que olvidar que el sistema de vigilancia del virus de la gripe común no solo se basa en la notificación de los casos detectados por el sistema centinela mencionado, sino que también recoge la notificación de los brotes y la vigilancia de los casos hospitalizados con gripe, entre otros.
¿Se debería implantar este sistema de vigilancia centinela con la COVID-19?
Tanto la Organización Mundial de la Salud como el Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades recomiendan que los países evolucionen de una vigilancia de emergencia, caso por caso, hacia una más “sostenible y orientada hacia objetivos”. Es cierto que todavía no es el momento, en plena sexta ola, pero con el tiempo se tiene que ir normalizando y vigilar la COVID-19 como el resto de enfermedades respiratorias, con médicos centinelas que diagnostiquen por síndrome clínico, haciendo PCR a hospitalizados y siguiendo con el estudio del virus SARS-CoV-2 para comprobar como muta.
Fuentes (consultadas 23/01/2022):
- ¿Qué significa ‘gripalizar’ la COVID-19? Abordar la vigilancia y evolución de esta enfermedad usando un sistema similar al de la gripe común · Maldita.es – Periodismo para que no te la cuelen
- Sistemas y fuentes de informacion del SVGE_2019-20.pdf (isciii.es)
- España ultima un sistema para vigilar la covid como la gripe común | Sociedad | EL PAÍS (elpais.com)
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